Ayer día 20 celebrábamos en la parroquia de toda su vida, el Perpetuo Socorro de Madrid, el funeral por nuestro querido hermano misionero José Mª Montes fallecido en nuestra Misión de Costa de Marfil.
Éramos muchos los que estábamos allí unidos por su recuerdo: la familia, los redentoristas, los amigos, vecinos del barrio, todos en torno a un gran hombre, un sencillo hombre que tenía una pasión: la misión.
José Mª nació y vivió para ser misionero y misionero redentorista, de los que están con la gente, en la calle, a pie de cotidianeidad, de lo pequeño, de lo sencillo, de las relaciones humanas, de la calidad de una abrazo, un apretón de manos. José Mª es un hombre sencillo pero fuerte, con una conciencia y una actitud de justicia y solidaridad enormes.
Pasión, así lo definía ayer en unas palabras que como Asociación para la Solidaridad ofrecí en la acción de gracias (no podía ser mejor momento). Pasión por la misión, pasión por África, pasión por la justicia, pasión por la solidaridad con los más pequeños.
Somos muchos los que hemos compartido con él momentos en su querido Costa de Marfil y en España, somos muchos los que sabemos que José Mª no va a pasar desapercibido para nadie y menos para nosotros como Asociación, él que favoreció tantas experiencias en nuestros voluntarios, que se volcó y ayudó al pueblo marfileño para generar proyectos de desarrollo para la comunidad, siempre va a ser parte fundamental de la historia de nuestra Asociación.
Gracias José Mª por TODO, gracias por tu pasión por la vida, sigue ayudándonos para que nuestro compromiso con y por la justicia y la solidaridad sea nuestra actitud en la vida como lo fue en la tuya.
José Mª sigues con nosotros.
Justi Sánchez